Carlos III y su esposa Camila fueron coronados en la jornada de hoy como rey y reina del Reino Unido.

La ceremonia tuvo lugar por la mañana en la tradicional Abadía de Westminster, emplazada en el centro de Londres. Hasta allí se acercaron miles de personas para saludar a los monarcas quienes arribaron al lugar en una breve procesión en carroza que partió desde el Palacio de Buckingham.

La gran concentración de gente no estuvo exenta de protestas y detenciones de manifestantes antimonárquicos, informó Télam.

En el interior de la Abadía de Westminster, unos 2.300 invitados presenciaron la entronización del rey, entre ellos la primera dama estadounidense Jill Biden, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva y los reyes Felipe VI y Letizia de España, y el embajador argentino Javier Figueroa, además de cientos de representantes de la sociedad civil británica.

Carlos III y Camila fueron proclamados rey y reina hace ocho meses tras la muerte de Isabel II, quien estuvo al frente de la monarquía británica por siete décadas.

Pese a la crisis, los monarcas utilizaron tres coronas engarzadas de diamantes y piedras preciosas, varios ropajes antiguos bordados con oro que el rey fue vistiendo en distintas fases de la ceremonia, tres cetros y un par de espuelas de oro.

Tras la ceremonia en la Abadía, los monarcas regresaron al Palacio de Buckingham escoltados por miles de militares en uniforme de gala y desde allí aparecieron en el balcón para saludar a la multitud acompañados por miembros de la familia real.