El INDEC reveló que la canasta de crianza para niños y niñas de hasta 12 años supera el medio millón de pesos mensuales. Mientras los salarios se estancan, el costo de cuidar, alimentar y educar a un menor se vuelve cada vez más inaccesible.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) publicó los nuevos valores de la canasta de crianza y los resultados son tan fríos como alarmantes: en junio, mantener a un niño en Argentina costó entre $411.000 y $517.000 mensuales, dependiendo de la edad.
El cálculo incluye tanto los bienes y servicios necesarios como el costo estimado del tiempo de cuidado, un dato clave que pone en evidencia el esfuerzo real que implica criar a un hijo en medio del ajuste económico.
Para un bebé menor de un año, la canasta trepó a $411.201, compuesta por $126.412 en productos y servicios básicos y $284.788 por tareas de cuidado. Apenas un mes antes, esa cifra era levemente menor, lo que refleja que los costos siguen en ascenso, aunque con variaciones moderadas (0,14%).
Para niños de 1 a 3 años, el costo total asciende a $488.700 mensuales, con un fuerte peso en las tareas de cuidado ($325.473). En tanto, para los chicos de 4 y 5 años, el gasto mensual es de $411.310, mientras que para los de 6 a 12 años la canasta alcanza los $517.364, con más de la mitad del total destinado al mantenimiento básico (ropa, alimentos, educación, transporte, etc.).
La comparación intermensual muestra aumentos entre el 0,14% y el 0,24%, pero lo más preocupante no es la variación sino el punto de partida: criar a un solo hijo puede costar lo mismo —o más— que un salario promedio formal en el país.
La cifra pone en jaque a miles de familias que no logran cubrir la canasta básica y mucho menos afrontar los costos reales de la infancia. En un país donde la pobreza infantil supera el 60%, el informe del INDEC vuelve a poner sobre la mesa una verdad incómoda: tener hijos se ha vuelto un privilegio y sostener su crianza, una carrera de supervivencia.