Más de 130 trabajadores se quedaron sin empleo entre junio y septiembre. Ahora, exigen que la empresa cumpla con la ley.
Los ceses se realizaron en dos tandas, de alrededor de 65 personas cada una, y la empresa comunicó que aplicaría lo previsto en el artículo 247 de la Ley de Contrato de Trabajo, que permite pagar la mitad de las indemnizaciones en ciertos casos.
La protesta incluyó bloqueos en el acceso a la planta: los despedidos y sus familias cortaron el ingreso a la fábrica, quemaron neumáticos y evitaron la salida y entrada de camiones, en reclamo del pago íntegro y para pedir garantías frente a posibles nuevos ceses.
Fuentes locales y gremiales advierten que el conflicto refleja una situación más amplia en la industria cerámica de la región, golpeada por la caída de la actividad, el freno a la obra privada y costos energéticos e impositivos que presionan a las fábricas, fenómeno que en los últimos meses se tradujo en suspensiones y despidos en otras plantas.
Desde los despedidos sostienen que su reclamo es simple: “Nos quieren pagar la mitad, pero reclamamos lo que nos corresponde por ley”, dijeron en asambleas los trabajadores, que ya comenzaron a organizar turnos de corte y buscar asesoramiento jurídico para reclamar el pago íntegro de las indemnizaciones y otros derechos adeudados.